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La Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela (ANC) aprobó un decreto para investigar a miembros de la oposición que supuestamente están vinculados o que “hayan solicitado” a EE.UU. imponer sanciones a miembros del gobierno. Entre ellos están el líder opositor Freddy Guevara y el presidente de la Asamblea Nacional Julio Borges.

El decreto rechaza las sanciones de Estados Unidos y permite que los opositores acusados de apoyar estas medidas sean llevados a juicio por traición.

Durante la sesión que fue llevada en vivo por la estatal VTV, Delcy Rodríguez, presidenta de la ANC, dijo que la derecha en Venezuela era una “organización criminal” y “antiVenezuela”.

Borges y Guevara no han reaccionado al decreto de la ANC. El partido opositor Mesa de la Unidad Democrática, tampoco se ha pronunciado hasta el momento.

No obstante, Borges dijo este martes antes de la sesión de la Asamblea Nacional (AN), previo al decreto, que Maduro buscaba excusas de su fracaso.

“Maduro no puede seguir culpando a otras personas de su propio fracaso. En la Asamblea Nacional lo que hemos hecho es cumplir con nuestro deber. La Constitución dice que todo contrato de interés público debe ser aprobado por la AN y eso lo ha violado el gobierno”, afirmó.

“Traición a la patria es robarse el dinero de los venezolanos, es hacer que PDVSA produzca menos petróleo hoy que décadas atrás, es endeudar a Venezuela; traición a la patria es arrodillarse ante Cuba o cualquier gobierno extranjero, o después del boom petrolero más grande en el mundo que hoy los venezolanos coman basura en la calle, eso es traición a la patria”, añadió el presidente de la Asamblea Nacional.

Las sanciones a Venezuela

La Casa Blanca anunció el viernes que el presidente Donald Trump firmó un decreto imponiendo nuevas sanciones a Venezuela.

La acción les prohíbe a los bancos de EE.UU. comprar nuevos bonos del gobierno venezolano y su compañía estatal petrolera PDVSA. La orden también limita las transacciones con bonos existentes que sean propiedad del sector público venezolano.

“No nos quedaremos viendo mientras Venezuela se desmorona”, dijo la Casa Blanca en el comunicado.

“Por qué nos quieren agredir por la economía cuando el presidente Maduro hace más de dos años hablaba de la guerra económica no se le entendían, no le comprendían a que se refería, bueno aquí está, se están quitando las caretas, sanciones y más sanciones contra Venezuela desde los centros imperiales creen que asfixiando la economía de Venezuela, el pueblo de Venezuela”, dijo la presidente de la Asamblea Nacional, Delcy Rodríguez sobre las sanciones.

“No conocen a este pueblo no saben de qué estamos hechos los venezolanos y las venezolanas, estamos hechos de amor pero también de firmeza cuando se trata de defender la patria y nosotros aquí frente a nuestro libertador lo hemos jurado y lo juraremos por siempre cada minuto defender a Venezuela de cualquier tipo de amenaza imperial”, añadió.

El canciller de Venezuela Jorge Arreaza reaccionó desde la ONU.

“Las de hoy son las peores sanciones a Venezuela en 200 años”, dijo.

El Departamento del Tesoro ya había emitido una amplia gama de sanciones contra el presidente de Venezuela Nicolás Maduro y varios de sus funcionarios después de que se instalara la Asamblea Nacional Constituyente.

Poco después, el Departamento del Tesoro congeló todos los bienes de Maduro sujetos a la jurisdicción de EE.UU. y les prohibió a sus ciudadanos que hicieran transacciones con él.

Además de Maduro, 13 otros funcionarios han sido sancionados.

Maduro es el cuarto mandatario sancionado por Estados Unidos: se suma a la lista compuesta por Kim Jong-un (Corea del Norte), Robert Mugabe (Zimbabwe) y Bashar al Assad (Siria).

Maduro cuestionó las razones de las sanciones en su contra a principios de este mes. “¿Por qué se me sanciona? Porque soy capaz de decir las verdades de las persecuciones contra los pueblos mexicano y latinoamericanos por parte del gobierno de Donald Trump, y la deportación, expulsión y abuso y tortura de miles de latinoamericanos”, dijo.

El decreto estipula que todas las transacciones de una persona en EE.UU. o de un estadounidense con el gobierno o PDSA estarán prohibidas, como adquirir nuevas deudas de más de 90 días con PDVSA, nuevas deudas con más de 30 días o comprar acciones del gobierno de Venezuela.