Tras activar la alarma de incendios para lograr que los pasillos de la escuela se llenen, y abrir las ráfagas contra sus antiguos compañeros de secundaria con un fusil semiautomático, Nikolas Cruz logró escapar de la secundaria Marjory Stoneman Douglas High School de Parkland (Florida) y estuvo cerca de quedar prófugo tras el macabro ataque.
La cacería humana duró poco. La policía, que lo capturó en una zona residencial a más de un kilómetro de la escuela, explicó cómo hizo el joven de 19 años para salir del edificio, en medio de la presencia policial que rodeaba la zona.
En una conferencia de prensa, las autoridades apuntaron que Cruz se “camufló” en medio de sus propias víctimas que huían despavoridas de la secundaria. No todos los alumnos, en medio del pánico, notaron que entre ellos corría el autor de la masacre.
No obstante, igualmente la policía logró identificarlo y seguirlo hasta la zona de Coral Springs, donde fue arrestado “sin incidentes”. Según informó la policía, Cruz debió ser atendido por los servicios médicos ya que, aunque no presentaba heridas de gravedad, sufría problemas para respirar. Durante la noche, fue llevado a una cárcel.
El joven de 19 años se presentó a la hora de la salida del colegio en Parkland, una ciudad unos 80 kilómetros al norte de Miami, con un fusil AR-15 y gran cantidad de munición.
Un abogado que representa a la familia que lo albergaba, luego de la muerte de su madre, se refirió a su personalidad. “Era un niño con modales. Vivió por tiempos difíciles tras perder a su madre, pero obedecía todas las reglas de la casa. Vivió allí por casi tres meses sin problemas y la familia está sorprendida y horrorizada por todas las versiones que circulan”, explicó James Lewis.
El representante señaló que, por ahora, no pueden identificar los motivos que llevaron a Cruz a cometer la masacre. “Nunca habló sobre algún rencor sobre la escuela. El chico ha sido descrito como un poco incómodo, raro, pero nada que explique esto”.
Nacido en septiembre de 1998, Nikolas Cruz había colgado en las redes sociales mensajes “muy alarmantes”, indicó el sherif de Broward, Scott Israel, sin precisar su naturaleza, insistiendo en la necesidad de denunciar ese tipo de publicaciones.